El hombre que tiene todas las papeletas para quedarse con la silla grande en Alemania es Friedrich Merz, un veterano de la CDU, ese combo conservador que quiere volver a mandar. Este tipo no es nuevo en el negocio, ha estado en el Parlamento Europeo y en el Bundestag, además de liderar su partido en varias ocasiones. Pero ojo, que su historia con Angela Merkel fue como un pleito de colmadón, porque ella lo dejó fuera del coro en su tiempo. (Wikipedia)
En las elecciones recientes, la CDU de Merz sacó un 28.5% de los votos, poniéndolo alante, pero la AfD, ese grupo de extrema derecha que muchos ven con malos ojos, se llevó un 20.6%. Mientras tanto, el SPD, que está en el gobierno actual, apenas alcanzó un 16.5%, lo que deja la cancha abierta para que Merz negocie su camino al poder. (El País)
El problema es que, aunque tiene chance de ganar, su camino no es color de rosa. La política en Alemania está más trancada que un motor sin gasolina. Formar gobierno será un rebú porque la AfD está fuerte, pero nadie quiere hacer coro con ellos. Así que Merz tendrá que armar un equipo con los que estén dispuestos a negociar, y eso no será fácil. (Huffington Post España)
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